Conquista_de_Canaan

Advertencia: El mandamiento que nuestro Señor Jesucristo dejo de amarnos como Él nos ha amado, excluye matar. La teología anabautista nos invita a buscar obrar sin violencia pero con firmeza, decisión y valor. Con respecto a los eventos de violencia narrados en el Antiguo Testamento {2} dice “Para el pueblo cristiano, lo importante debe ser la manera como Jesús interpreta el Antiguo Testamento. Si miramos la manera como Dios libra a Israel de los ejércitos del faraón, notaremos que lo hizo en el mar, sin batalla alguna … Aunque el pueblo peregrinó largo tiempo en el desierto en medio de guerras y conflictos y entró a Canaán luego de batallas sangrientas, éste no fue el plan original de Dios puesto que quería un pueblo que practicara la justicia y la paz; definitivamente la desobediencia y la falta de confianza en Dios hacen que se origine la violencia. El pueblo israelita a pesar de la liberación milagrosa a través del Mar Rojo, no confió en que Dios caminaría con ellos (Éxodo 23:23 y Deut. 1:26-27).”

Desde siempre, el Señor ha amado también a quienes no lo han obedecido y a quienes no creen como dice:

Deuteronomio 10:17-18

Porque Jehová vuestro Dios es Dios de dioses y Señor de señores, Dios grande, poderoso y temible, que no hace acepción de personas, ni toma cohecho;

Aunque es misericordioso, dando a quien le pide y dejandose encontrar de quien le busca, también es justo y no deja sin castigo la maldad sin arrepentimiento.

El plan de salvación que incluye a todos los que quieran aceptarlo, requería en ese tiempo (alrededor del 1400aC) al pueblo de Israel asentado al menos un tiempo en Canaán, espacio ocupado por otros pueblos: Cananeos, Jebuseos, Amonitas, Filisteos, etc. Un mapa propuesto para la época de Josué es:

Mapa tomado de {3}

Por la desobediencia del pueblo judio tuvieron que luchar bastante con esos pueblos y sufrir tanto para llegar como una vez asentados.

Entre las instrucciones del pueblo judio en Canaan estaban:

Deuteronomio 9:3-5

Entiende, pues, hoy, que es Jehová tu Dios el que pasa delante de ti como fuego consumidor, que los destruirá y humillará delante de ti; y tú los echarás, y los destruirás en seguida, como Jehová te ha dicho. No pienses en tu corazón cuando Jehová tu Dios los haya echado de delante de ti, diciendo: Por mi justicia me ha traído Jehová a poseer esta tierra; pues por la impiedad de estas naciones Jehová las arroja de delante de ti. No por tu justicia, ni por la rectitud de tu corazón entras a poseer la tierra de ellos, sino por la impiedad de estas naciones Jehová tu Dios las arroja de delante de ti, y para confirmar la palabra que Jehová juró a tus padres Abraham, Isaac y Jacob.

Deuteronomio 7:2-4

y Jehová tu Dios las haya entregado delante de ti, y las hayas derrotado, las destruirás del todo; no harás con ellas alianza, ni tendrás de ellas misericordia. Y no emparentarás con ellas; no darás tu hija a su hijo, ni tomarás a su hija para tu hijo. Porque desviará a tu hijo de en pos de mí, y servirán a dioses ajenos; y el furor de Jehová se encenderá sobre vosotros, y te destruirá pronto.

Lo central de la conquista duró unos 7 años (1401 a 1394), comenzando con la victoria en Jericó cuyas características se repiten en otros momentos: (1) obrar sobrenatural de Dios, (2) que los Israelitas no preparados en arma tuvieron que derramar sangre, (3) que a los cananeos que temieron al Dios de Israel (como Rahab y su familia y los gabaonitas) Dios les preservó la vida.

El libro de Josué es un relato cronológico que en general exalta a Dios y la obediencia de Josúe para lograr victoría sobre los guerreros Cananeos –la lista en 12:24 de 31 reyes derrotados es impresionante. Aunque en ocasiones parece emplear hipérboles o exageraciones típicas de los relatos de guerra, como hace notar Patton, A. 2020 por ejemplo en 10:36-39 dice que no dejaron habitante vivo en Hebrón ni Debir, pero más adelante en 15:13-15 dice que había cananeos en esas ciudades.

Puede verse un mapa con el orden de varias batallas en https://www.youtube.com/watch?v=itf-H7BYL9

Como indica Patton, A. 2020, el objetivo de la conquista no era destruir a las personas, sino erradicar la idolatría y dar espacios para habitar al pueblo de Israel, por eso tenían el mandamiento de Deuteronomio 20:10-11 era buscar paz antes de combatir: “10 Cuando te acerques a una ciudad para combatirla, le intimarás la paz. 11 Y si respondiere: Paz, y te abriere, todo el pueblo que en ella fuere hallado te será tributario, y te servirá.”

Tras la victoria de nuestro Señor Jesucristo sobre el enemigo y el poder que nos ha concedido a quienes creemos, no requerimos destruir, aunque las luchas continúan pero en Espíritu como se expresa en Efesios 6:12 Porque no tenemos lucha contra sangre y carne, sino contra principados, contra potestades, contra los gobernadores de las tinieblas de este siglo, contra huestes espirituales de maldad en las regiones celestes.

Desde Adán hasta Cristo, nos ha quedado un testimonio histórico de las consecuencias de vivir en desobediencia, guerras, destrucción y como el mismo pueblo de Dios se vio obligado a entrar en esa lógica de sufrimiento, en Cristo podemos recibir perdón de pecados, reconciliarnos como hijos del Padre Eterno y vivir confiados en Él que es nuestro Protector, ¿queremos aceptarlo hoy? (ver Oración de fe).

Referencias

• {1} Biblia. Reina Valera 1960. http://www.biblegateway.com/versions/index.php?action=getVersionInfo&vid=60
• {2} La objeción de Conciencia como Ejercicio de la Noviolencia en la Construcción de Paz. Manuales de capacitación en construcción de paz. Serie Justapaz. 2004.
• {3} http://www.foundationsforfreedom.net/Article/Bible/OT/OT_Historical/Joshua/Palestine_Time-of-Conquest.png Copia libre.
• Patton, Andy, 2020. Why Did God Command the Invasion of Canaan in the Book of Joshua? https://bibleproject.com/blog/why-did-god-command-the-invasion-of-canaan-in-the-book-of-joshua/